Este nombre es una combinación del verbo to be (ser o estar) y la palabra áurea que hace referencia a la proporción áurea. Si te estás preguntando de qué trata esta proporción, ¡quédate para descubrirlo! Alerta spoiler: la proporción áurea y la belleza están incondicionalmente ligadas.
¿Qué es la proporción áurea?
La proporción áurea es un número irracional, también conocido como número divino, que hace referencia al vínculo entre dos segmentos de una misma recta. Esta proporción se encuentran tanto en la naturaleza como en figuras geométricas. Además, era de gran ayuda para pintores y escultores, que encontraban así modelos con proporciones completamente simétricas, a la hora de crear obras bellas a la par que realistas.
Realizando un encadenamiento de rectángulos y combinando algunos de sus vértices con una línea en forma de espiral, el resultado obtenido es la representación gráfica de la proporción áurea, conocida como espiral áurea o espiral de oro. Esta espiral se halla de manera muy frecuente en la naturaleza como en plantas, conchas de moluscos o galaxias. También, se ha usado en algunas obras de arte como Las Meninas de Velázquez o La lección de anatomía de Rembrandt.
Es por eso que se dice que todas las formas que respetan esta proporción áurea son consideradas bellas. Y, a lo largo de los años, algunos científicos han decidido usar esta fórmula divina para establecer qué rostros son los más atractivos.
La máscara de Marquardt, el rostro perfecto basado en el número divino
Stephen Marquardt, un investigador de la Universidad de California creó una máscara basada en la proporción áurea para medir y probar que la belleza no dependía de un lugar, una cultura o una raza determinada. Para establecer esto, primero realizó fotografías de rostros de mujeres creando variaciones en las proporciones y, más tarde, solicitó que estas fotografías fueran ordenadas del rostro más bello al más deslucido según su opinión.
Las personas que participaron en este estudio eran de distintas nacionalidades y el 97% de ellas clasificó los rostros siguiendo el mismo orden que Marquardt. Por lo que finalmente dedujo que la población mundial tenía la misma percepción de la belleza.
La máscara de Marquardt se coloca sobre la cara de la persona en cuestión y sirve para detectar las diferencias existentes entre esta y el rostro de la persona. Es por ello que ha sido muy útil para realizar operaciones estéticas y de reconstrucción facial.
¿Tienes curiosidad por saber cómo de bello es tu rostro en relación a la proporción áurea? Puedes consultarlo en la siguiente calculadora.
Pero por supuesto, debes recordar que la belleza es subjetiva y está en los ojos de la persona que mira.